En cuanto a la prevención en la
depresión podemos hablar de tres niveles:
- la prevención primaria, encaminada a evitar la aparición de nuevos casos
- la prevención secundaria, dirigida a realizar un diagnóstico precoz y consecuentemente un tratamiento temprano
- la prevención terciaria sobre los pacientes para evitar recaídas y complicaciones como la cronicidad y el suicidio.
Prevención primaria
Es decir, evitar que se produzcan
nuevos casos, debemos tener en cuenta:
- Los aspectos biológicos. Hoy
en día no se puede prevenir un déficit genético ni un desajuste bioquímico
cerebral. No obstante hay que confiar en la investigación centrada sobre todo
en las moléculas (neurotransmisores, proteinas, hormonas) que están alterados
en los pacientes que sufren depresión, y como no, en la investigación genética
que pueda dilucidar que grupos de genes están involucrados en la vulnerabilidad
de este trastorno.
Genética y depresión - Los aspectos psicosociales. En este sentido podemos hablar de una intervención a nivel personal y otra a un nivel social. Empezaré por la segunda:
o Las actuaciones deben
dirigirse, por una parte, a que nuestros niños y jóvenes mejoren la autoestima
y las estrategias de afrontamiento ante la adversidad (utópica labor a realizar
en el seno de la familia y de la escuela); por otra parte, competería a las
políticas laborales, sanitarias y sociales para disminuir globalmente los
factores de estrés psicosocial (objetivos más utópicos todavía).
La escuela, clave en la formación de las personas |
o
A nivel individual
podríamos resumirlo en llevar una vida sana y lo más plena posible. Evitar el
consumo de tóxicos y mantenerse en buena forma, no sólo física, sino
intelectual y disponer de una buena red de apoyo emocional que es nuestro mejor
escudo protector. También deberíamos plantearnos periódicamente nuestros
objetivos, para tener expectativas realistas así como evaluar nuestro estilo de
vida y el papel que jugamos en nuestro entorno (o dicho de otra forma, la gran
importancia que tiene el hecho de sentirse útiles).
Familia y amigos, nuestra red emocional |
Nuestra vocación |
Nuestras aficiones |
Ser útil
Prevención secundaria:
Me interesa hacer hincapié en el
diagnóstico precoz. Para ello es importante el reconocimiento de los síntomas
por parte del paciente y de su entorno, evitando el miedo al estigma de la
enfermedad mental o la preocupación por los efectos secundarios de la
medicación. Asimismo el hecho de que existan circunstancias adversas haciéndola
“comprensible” suele retrasar la búsqueda de ayuda.
La Atención Primaria, fundamental para una sanidad de calidad |
También es determinante el papel de
la Atención Primaria para realizar dicha prevención. Casi el 10% de los
pacientes vistos por médicos de familia tienen síntomas depresivos y en muchas
ocasiones no reciben este diagnóstico.
Prevención terciaria:
Consistiría en intentar evitar los
empeoramientos en forma de:
- Recurrencia (cuando hay un período de más de 6 meses sín síntomas después de un tratamiento y aparece un nuevo episodio depresivo).
- Recidiva (cuando se produce la reanudación de los síntomas sin haber finalizado el tratamiento, esto es durante un período menor a 6 meses libres de síntomas).
Para ello, existen unas pautas de
mantenimiento de los tratamientos farmacológicos, en función del número de
fases depresivas que haya sufrido el paciente.
Por otra parte, las características
del cuadro orientan al profesional para realizar una vigilancia de las
complicaciones, como la cronicidad que puede producirse en un tercio de los
casos. Hay que tener en cuenta que un correcto tratamiento reduce el riesgo de
cronicidad a un 10%.
Prevención terciaria: evitar la cronicidad |